611. La comunidad de origen en el principio inteligente de los seres vivientes. ¿no es la consagración de la doctrina de la metempsicosis?
«Dos cosas pueden tener el mismo origen y más adelante pueden no parecerse en nada. ¿Quién reconocería el árbol con sus hojas, flores y frutos en el germen informe, contenido en la simiente de donde ha salido? Desde el momento en que el principio inteligente logra el grado necesario para ser espíritu y entrar en el período de la humanidad, cesa de tener relación con su estado primitivo y deja de ser el alma de la bestia, como el árbol la simiente. No le resta al hombre del animal más que el cuerpo, y las pasiones que nacen de la influencia de éste y del instinto de conservación inherente a la materia. No puede, pues, decirse que tal hombre es la encarnación del espíritu de tal animal, y por consiguiente, la metempsicosis, tal como se entiende, no es exacta».