EL GÉNESIS LOS MILAGROS Y LAS PROFECÍAS SEGÚN EL ESPIRITISMO

Allan Kardec

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45. Un desierto inmenso y sin límites se extiende más allá de la aglomeración estelar mencionada, rodeándola. Las soledades suceden a las soledades, las planicies inconmensurables de vacío se extienden a lo lejos. Las aglomeraciones de materia cósmica se encuentran aisladas en el espacio, son como las islas flotantes de un inmenso archipiélago. Si se quiere tener una idea de la enorme distancia que separa al conglomerado de estrellas del que formamos parte de los conjuntos más cercanos, es preciso saber que esas islas estelares son escasas y están diseminadas en el vasto océano de los cielos y que la extensión que separa a una de otras es incomparablemente mayor a sus respectivas dimensiones. Ahora bien, recordemos que la nebulosa estelar mide, en números redondos, mil veces la distancia de las estrellas más próximas tomadas unitariamente, es decir, alrededor de 557.207 trillones de kilómetros (557.207.000.000.000.000.000.000 ). La distancia que se extiende entre ellas es mucho mayor aún, por lo cual no podría expresarse en números que fuesen accesibles a la comprensión de nuestros espíritus. Sólo la imaginación en sus concepciones más elevadas es capaz de alcanzar esa prodigiosa inmensidad, esas soledades mudas y privadas de toda apariencia de vida y enfrentar la idea de esa infinitud relativa.